- Director: Guy Hamilton
- Actores: Roger Moore, Christopher Lee, Britt Ekland, Maud Adams, Herve Villechaize, Clifton James, Marc Lawrence, Bernard Lee, Lois Maxwell, Desmond Llewelyn
- Sinopsis: En esta ocasión nuestro agente secreto favorito recibe una amenaza de muerte en forma de bala de oro, lo cual significa que el asesino a sueldo mas peligroso del momento, Francisco Scaramanga, conocido como el hombre de la pistola de oro, intentará acabar con él. Entonces 007 pasa a la acción intentando encontrar y acabar antes con Scaramanga.
- Critica: Segunda entrega de la saga protagonizada por Roger Moore, en la que se recupera un poco el nivel que se había venido bajando en las ultimas películas de 007. Se nota que Roger Moore se siente cómodo con el personaje y le vuelve a dotar de un fino sentido del humor ya visto en su primera aparición.
La historia es un poco atípica, porque en esta ocasión Bond no recibe una misión como siempre, sino que cuando se le invita a tomarse unas vacaciones para evitar ser asesinado por el hombre de la pistola de oro, él decide ser quien lo encuentre antes para matarlo.
En cuanto al malo de la película la verdad es que me ha gustado la presencia de Christopher Lee, haciendo de un asesino a sueldo que tendrá una relación amistad/odio con 007, y su singular secuaz, Nick Nack.
Respecto a las chicas Bond de esta entrega, pues lo habitual, Britt Ekland es la agente rubia tonta que esta enamorada de James y Maud Adams la amante de Escaramanga que se enamora de 007 e intentara ayudarle.
La banda sonora recupera el estilo clásico, volviendo a ser John Barry el encargado de componer y dirigir todo el score.
Destacar la escena de la persecución de coches entre Escaramanga y James Bond, excitante y bien rodada, y la posterior huida del primero en su coche-avioneta. También destacable la escena inicial donde Escaramanga tiene un duelo con un asesino enviado para acabar con él, igual que la escena de la lucha final entre Bond y el hombre de la pistola de oro.
Y la película no es mas buena porque vuelve a aparecer el apestoso y odioso sheriff que ya acabó de estropear la anterior entrega de 007. Los guionistas supondrian que era un personaje gracioso y lo han metido con calzador en la historia, verlo de nuevo en pantalla ha sido lo peor de todo. Menos mal que a pesar de aparecer bastante no llega al nivel de excecrabilidad de su aparición en "Vive y deja morir".
En resumen, una entrega que mejora las ultimas tres anteriores, aunque no llega al nivel de las primeras de la saga. Roger Moore hace casi olvidar a Sean Connery, ya que aporta personalidad al personaje y consigue hacerse bien con él.
Mi nota: 7
Saludos.
Kasko.
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